top of page
El Albergue.
Una rama del camino.
Cualquier senda... a la casa lleva.
En la calidez de la casa.
Durante la mañana llegan.
Todo se parece a todo Sí. En el espacio hay ecos, pero en las formas y en las ideas también. Todo me recuerda a todo Sí En el silencio hay sonidos pero en los pasos y en los post-it también.
Tuvimos en cuenta, como peregrinos, lo que hubiésemos querido encontrar en los albergues del camino: sencillez, comodidad, tranquilidad y acogida, unido a una convivencia de peregrinos, compartiendo conversación, alegría alrededor de la mesa al final de la jornada. Y es eso, lo que ahora, desde este Casa abierta al Peregrino, intentamos día a día llevar a cabo.
Zabaldika, una pausa
En el Camino.
bottom of page